La estrategia de Nintendo buscaba enfocarse totalmente en los juegos de video, a diferencia de sus rivales que tenían ya indicios de convertir sus sistemas en medios de entretenimiento globales, con capacidades en línea y reproducción de películas DVD. Ello le permitía a GameCube tener un precio un poco más competitivo.

Uno de las curiosidades del sistema es que las primeras unidades incluían una salida de video digital, lo cual la convertiría en la primera consola casera en tener este tipo de salida, varios años antes de otras con HDMI.

A través de diversas planeaciones internas, la compañía trajo Xbox, una consola que se basa fuertemente en el amigable entorno de desarrollo que otorgaba para desarrolladores en PC, un sistema muy potente que traía consigo además disco duro interno y un adaptador de banda ancha integrado. La consola estaba ya pensada para proveer un robusto entorno de juego en línea con Xbox Live en 2002.

Xbox se caracterizó por hacer que en su mayoría, los juegos third-party tuvieran mejores visuales y desempeño que GameCube y PS2, llegando a resoluciones tan altas como 1080i, dando paso así a la alta definición (HD) para pantallas que en su momento la pudieran soportar.

La SEGA Dreamcast representaba la verdadera fidelidad prometida de Arcade en casa, con una arquitectura basada en el sistema NAOMI.

Con juegos espectaculares que a lo largo de la historia han encontrado su audiencia, SEGA se despediría del hardware casero en consolas con un sistema gratamente recordado.

Como es tradición en las portátiles de Nintendo, la GBA tuvo varias revisiones que mejoraban sobre todo la calidad de la pantalla.

El formato utilizado por PlayStation 2 sería el DVD, Sony utilizaría al sistema como un trampolín para este mismo medio óptico.

Con el tiempo, Sony lanzó revisiones del sistema que serían más livianas (PS2 Slim) y que incluirían a su vez adaptador de banda ancha para el juego en línea.

Sony siendo una de los fabricantes de electrónicos mas grandes de Japón, entraba a la guerra de consolas con su sistema de 32 bits, PlayStation.

La historia de Playstation se remonta a la época en la que Ken Kutaragi, padre del sistema, trabajó junto con Nintendo, en producir el chip de audio de la SNES, siendo él parte de Sony. La colaboración conllevó a que posteriormente se ideara un sistema CD-ROM para la consola de 16 bits de la Gran N, que no pasaría de ser solo un prototipo, para después convertirse en el gran proyecto especializado en gráficas 3D de Sony.

Al usar el formato de CD, las partidas de los juegos ya no se podrían salvar más en una batería de cartucho y, a diferencia de sus competidores, Sony ofreció tarjetas de memoria externas que se convertirían en la norma para la siguiente generación de consolas.

La consola tuvo revisiones en si misma y en su control, lanzando así el mando DualShock el cual incluía 2 joysticks análogos y vibración.

La PlayStation se convirtiría en la líder de la 5ta generación de consolas vendiendo más de 100 millones de consolas y teniendo disponibles más de 2,400 juegos diferentes.

La gran ventaja del formato CD era, sin duda, su amplio espacio de almacenamiento, algo que le costó fuertemente a la consola de la Gran N. Sin embargo, a cambio, el formato cartucho le permitió a los jugadores de Nintendo 64 nunca sufrir por los famosos tiempos de carga que estaban implícitos en el formato CD-ROM.

Al ser un sistema especializado en gráficos 3D, el diseño especializado de los creativos de Nintendo, sentó las bases de un robusto gameplay en escenarios tridimensionales y ambientes virtuales, gracias al innovador control de la consola que permitía exploración, movimientos y manejo cámara no vistos en la industria. El mismo control contaba con una bahía que le permitía expandir funcionalidades, desde tarjetas de memoria, hasta Rumble Paks. Además, la consola contaba de inmediato con 4 puertos para controles, lo que derivó a que el multiplayer local se volviera una característica insignia del sistema.

Aunque Nintendo 64 no tuvo el mismo soporte de publishers del que Nintendo había gozado en generaciones pasadas, la calidad de la gama de juegos que Nintendo y sus socios, como Rare, sobresaldría a un grado tal que cuenta con algunos de los juegos catalogados como de los más influyentes de la historia.

Otra mejora significativa fue la duración de la batería, que permitía 30 horas de juego tan con solo dos pilas AA.

El sistema en sí era muy capaz, con una compleja arquitectura basada en múltiples procesadores.